martes, 30 de abril de 2024

LÁGRIMAS DE COCODRILO

 


Victoria Prego se va de este mundo arropada por un inmenso rosario de lamentos, la mayoría formulados por miembros de la profesión, la de ella y la mía, con el añadido de otros muchos integrantes del gremio de la farándula política, que se han apresurado a desgranar el repertorio de tópicos que siempre vienen bien en estos casos, empezando por ensalzar la sacrosanta libertad para seguir por honestidad, independencia, sobriedad, equilibrio y todos los demás epítetos que se pueden encontrar en nuestro generoso idioma. Victoria es un modelo de virtudes periodísticas, vienen a decir quienes desde hace mucho tiempo están zarandeando esos mismos principios, y me temo que el término que acabo de utilizar se queda corto, porque en realidad los están pisoteando todos, hasta conseguir llevar a la profesión periodística al más bajo nivel conocido y en eso, hay que decirlo, están colaborando activamente muchos de nosotros mismos, a los que no parece importar poco ni mucho mentir, manipular, distorsionar, venderse al mejor postor, dejarse influir por unos y por otros. Querida Victoria Prego, admirada compañera, tu excelente ejemplo de profesional honesta sirve ahora para que lo zarandeen gentes deshonestas. No deberían usar tu nombre en vano. Deberían abstenerse de mencionarlo. Con seguir hozando en su porquería ya tienen bastante.

UN CURIOSO MOSAICO CALLEJERO

 


Pasear por las calles del casco antiguo de Cuenca ofrece la oportunidad de contemplar el curioso espectáculo que las nuevas técnicas urbanísticas aportan al pavimento con variados elementos decorativos. A los tradicionales (y discretos) registros antiguos del alcantarillado y el agua, se han ido uniendo todas las invenciones que el ser humano ha ido aportando para mejorar nuestros medios de vida, y así la electricidad, las redes telefónicas, una tras otra, el gas, la fibra y cualquiera sabe cuántas cosas más van quedando enterradas (soterradas, dicen los modernos, siempre empeñados en modificar el lenguaje) y, eso sí, cada uno a lo suyo. Porque cuando empezó todo esto, el entonces voluntarioso alcalde de la ciudad anunció, con tono firme, que se haría una conducción interior única y en ella se irían empotrando todos los cables y demás artilugios propios de la civilización y el progreso. Como corresponde a todas las promesas oficiales de los políticos, el destino es que no se cumplan y así damos lugar a este espectáculo que es especialmente significativo en las calles Pilares y Colmillo donde, al paso que vamos, no quedará hueco alguno para los guijarros y adoquines.

sábado, 27 de abril de 2024

COLA PARA ADORAR A LA FAMOSA

 


Ha comenzado la Feria del Libro de Cuenca, una magnífica noticia, sin duda alguna. El pregón inaugural, como es costumbre, se ha encomendado a un personaje famoso, en este caso famosa, Sonsoles Ónega, porque en estos fastos propios de la farándula mediática, lo que importa no es el mensaje, sino la presencia. El contenido del discurso importa bien poco, lo que interesa es que el famoso de turno se preste a hacerse una foto, todos alegres y sonrientes, con el amplio catálogo de autoridades del lugar que se apresuran a ponerse a su lado para que conste hasta la posteridad de que hubo un día en que durante unos segundos estuvieron juntos y compartieron un momento de gloria. Es más o menos el mismo espíritu que anima a cientos de personas a hacer una cola de más de dos horas de duración hasta que pueden llegar a las proximidades de la diosa del momento y que les firme un ejemplar de su exitoso libro, recién adquirido. Tampoco es imprescindible que lo lean: lo que importa es hacerse la foto con ella, un selfie si hace falta, y así luego poder presumir con la familia y los amigos de la urbanización, seguramente admirados ante quien ha tenido la oportunidad de estar junto a la famosa presentadora y escritora. Todo esto lo digo sin acritud, aunque alguien pueda pensar lo contrario. Es la normalidad del tiempo en que vivimos y no queda más que aceptarlo, porque desmontarlo no lo va a poder hacer nadie. Se cumple el rito, se da paso al pregón y a la cola de gente ansiosa por estar al lado del personaje famoso. Luego viene la verdad, la Feria auténtica, el libro, los libreros y escritores, cada uno con su afán y los libreros, intentando colocar un producto tan sensible y delicado. Eso es lo que importa y lo demás es solo vanidad de vanidades.

viernes, 26 de abril de 2024

PARADA APTA PARA TODOS LOS VEHÍCULOS

 


Esta es una imagen habitual. Se puede encontrar a cualquier hora del día, con escasas excepciones. Calle Colón, parada del autobús, algo que por su propia naturaleza todo el mundo suele respetar, al menos en las demás ciudades. Y si alguien no actúa correctamente, en seguida aparece un policía municipal y pone coto al desmán, con la correspondiente multa o actúa la grúa, que para eso existe. En todas partes, menos en Cuenca. Aquí los coches privados y sobre todo las furgonetas de reparto tienen bula para aparcar en cualquier sitio, incluidas estas zonas que deberían queda libres. Pues aquí no, de manera que cuando llega el autobús debe detenerse en medio de calle, interrumpiendo el tráfico hasta que se completa la maniobra de bajar y subir pasajeros. A veces, mientras espero la llegada del vehículo público, he visto pasar a uno de los coches en que la Policía Municipal se pasea por la ciudad. Nunca los he visto detener su plácida marcha para poner orden en esta anomalía.

 

miércoles, 24 de abril de 2024

LA PIQUETA ESTÁ LISTA PARA ACTUAR

 


La advertencia es clara y el cartel lo dice de manera terminante: este edificio está a punto de desaparecer, tan pronto la piqueta en forma de máquina destructora comience a actuar y lo hará, desde luego, de manera implacable, hasta no dejar en su sitio ni un ladrillo. Los interiores y complementos ya han sido desguazados y solo queda que se cumpla el destino marcado. Es la calle Alonso de Ojeda, número 14 y aunque el edificio actual no ofrece especiales atractivos arquitectónicos, formaba parte del paisaje urbano. Su inminente derribe abre, como siempre en estos casos vinculados al casco antiguo de Cuenca, el pasmoso interrogante: ¿qué surgirá en su lugar? La obra nueva, ¿merecerá tener la consideración de elemento visual adecuado al entorno o se producirá algún desafuero estético? Lo veremos pronto, porque la cosa no va a dilatarse mucho.

 

 



Y a la vez, cerca de ese edificio, hay otro igualmente amenazado y con motivos, todo hay que decirlo, porque su estado depauperado no permite una recuperación consoladora. Está en la calle de los Tintes, número 15 y como pasa con el anterior, tiene los días contados, para dar lugar a un atractivo solar que hace pareja con el que hay al lado, hundido hace ya un buen montón de años. Como en el caso anterior, veremos qué se hace en su lugar, en un espacio urbano tan delicado como es la singular calle de los antiguos tintadores de lana.

 



domingo, 21 de abril de 2024

UN TOQUE MUSICAL CON MENSAJE ESPIRITUAL

 


Uno va por la calle, tranquilamente, sin meterse con nadie y sin temer que tampoco nadie le moleste a uno, cuando de pronto, inopinadamente, sin previo aviso, se encuentra con una especie de coro musical que agrupado en una acera, ahí mismo, en Carretería, está ofreciendo al público paseante una especie de concierto. Como uno, de natural es curioso, se para a ver de qué va la cosa, advirtiendo, en seguida, que es uno de esos repetidos montajes místico-religiosos en que adeptos a no se sabe muy bien qué secta espirituosa intenta captar nuestra atención. Esta, por lo que dice el pequeño pasquín que distribuyen, no parece responder a ninguna religión conocida. La luz del mundo es su mensaje y pregonan la difusión de temas bíblicos de actualidad. No piden nada, no venden nada y no se sabe bien cual es su propósito en esta mañana dominguera en la que, sencillamente, cantar a capella unas cuantas cancioncillas envueltas en ese lenguaje bonachón que nos habla de buenas intenciones y felices resultados para quienes confían en el mensaje de un Dios inaprensible. Todas son mujeres y van severamente ataviadas, de oscuro, sin permitir ni una ligera nota de color o un leve atrevimiento decorativo. Las oigo durante unos minutos y luego sigo a lo mío, indiferente y descreído. No molestan, no hacen ningún mal. Solo cantan y ocupan un fragmento de acera. Y en la severa mañana conquense ponen un poco de música anodina, sin especial trascendencia, salvo para alguien que se quiera dejar atrapar. Los demás, que somos mayoría, seguimos a lo nuestro, indiferentes a mensajes trascendentales que hablan del más allá. Es más preocupante lo que tenemos al alcance de la mano, aquí mismo, en el devenir de cada día.

 

jueves, 18 de abril de 2024

EL ARTE DE NO CONTAR NADA

 

Una de las muchas cosas que me tiene maravillado del actual comportamiento de los medios informativos tiene que ver con la Feria de Abril de Sevilla. Nada que decir sobre dicho festejo en sí mismo; cualquiera que sea la cosa que yo piense, los implicados están en su derecho de hacer lo que les parezca conveniente, como lo tienen en Pamplona para hacer corridas de toros o en Valencia para quemar Fallas o, sin ir más lejos, aquí mismo para que cuando llegan las fiestas de San Mateo se hagan las barbaridades que en ese momento cruzan por los abotagados cerebros de los participantes. Allá cada cual. Lo que me tiene maravillado, insisto, es el tratamiento de todos los servicios informativos, todos, en todas las cadenas, y todos los días. Una vez y otra nos dicen lo mismo, nos cuentan idénticas cosas de un acontecimiento que no tiene nada que contar: gente paseando por el ferial, gente bebiendo y comiendo sin parar, coches de caballos yendo de acá para allá, gente bailando sevillanas. Y así, siete días. Y eso es lo noticiable que recogen estos servicios informativos televisivos, adocenados, repetitivos, sin nada que decir de lo que no tiene nada noticiable, solo imágenes repetidas, siempre en torno a los mismos temas. Me pregunto, como periodista veterano (y anticuado) a qué responde esta estulticia de los responsables de estos servicios. Qué encuentran de interés en repetir una y otra vez, todos los días, la misma temática con idénticas palabras. Viendo y oyendo estas cosas uno entiende por qué los medios informativos han emprendido esa carrera hacia ninguna parte.

miércoles, 10 de abril de 2024

ARTESANÍA URBANA

 


Hay que reconocer que el Ayuntamiento de Cuenca se esfuerza en intentar resolver un problema en apariencia imposible, el del tráfico por las enrevesadas calles del centro de esta ciudad. Naturalmente, lo mejor sería suprimirlo por completo, pero no creo que eso vaya a suceder en lo que queda de siglo e incluso es muy dudoso que en el próximo alguien se atreva a hacerlo. A falta de tener energías para adoptar una decisión firme y radical, lo que se hace es poner parches, uno aquí, otro allá y la cosa no solo no mejora, sino que incluso parece empeorar. La última chapuza, cambiar la ruta de los autobuses urbanos, para poner fin a la anomalía de que, al salir de la calle Doctor Chirino, entraran en la zona peatonal de Carretería, con el consiguiente sobresalto para los inocentes peatones y sus terrazas. La solución: rodear la calle del parque de San Julián para por la de Noheda salir a Aguirre, lo que supone una sucesión de apretadas esquinas en las que ha sido preciso eliminar varias plazas de aparcamiento. Éramos pocos… Todo ello, y a eso va finalmente este comentario, ha traído consigo una nueva parada del bus, en la calle José Cobo, delante de la Casa Catalina, ubicación que se ha señalizado con la chapucera inscripción que aquí se reproduce. La verdad, esto no mejora.